Me paso el día pegada a mi cámara, intento recoger la esencia de todo lo que me rodea. Es inevitable contemplar todo lo que me rodea con los ojos bien abiertos. Si miras al suelo te pierdes algo interesante, aunque siempre corres el riesgo de pisar una mierda de vaca sagrada!
Después del impacto inicial, la visión va cambiando día a día, la mirada se va acostumbrando y empiezas a ver más allá de la actividad frenética, la mugre y la miseria. Ves las miradas de curiosidad, miradas alegres y miradas hospitalarias. Si te paras y observas con detenimiento, te das cuenta de la felicidad que irradian los rostros que ves continuamente. Rostros que pertenecen a seres hundidos en la carencia material más absoluta. Impresiona.
Los niños son los mejores, disfruto con ellos, algunos pasan, otros se ruborizan,.. pero lo mejor es cuando se ven en la pantalla, se emocionan, se ríen, me abrazan,...
Amabilidad, cortesía y buen rollo de la gente, así es fácil plasmar lo que son,..
Cris, va por ti!
Besoss
